1.- Niños, niñas y adolescentes: La Constitución es un texto para varias generaciones. En esa línea, deben quedar expresamente protegidos los niños, niñas y adolescentes, buscando que crezcan en un ambiente protector, sin abusos o violencia de cualquier tipo.
2.- Igualdad de género: Es fundamental dejar establecido algo clave: La Constitución debe garantizar la igualdad plena entre mujeres y hombres, sin letra chica.
3.- Espiritualidad: Soy creyente, soy católico y tengo mucha fe en Dios. Debemos valorar y fomentar la sana espiritualidad más allá de una u otra religión. En ese sentido, la libertad de culto, la posibilidad de construir templos religiosos y todos los demás logros alcanzados deben quedar plasmados en nuestra Constitución.